Las fundas dentales consisten en un material colocado sobre la raíz del diente, sustituye a la corona dental preexistente. A diferencia de las coronas dentales que se colocan sobre los implantes dentales, las fundas dentales aprovechan lo que se ha podido salvar del diente para con ellas formar una unión que sustituye el diente. Sirven para aprovechar las raíces de aquellos dientes que han sufrido daños en la corona dental pero que todavía conservan la raíz en buenas condiciones.
Para la realización de fundas dentales se emplean gran variedad de materiales que determinarán el tipo de funda. Entre los más habituales a la hora de realizar l tratamiento están el circonio, la porcelana, el composite y el titanio.
UTILIDAD Y VENTAJAS DE LAS FUNDAS DENTALES
Las fundas dentales cumplen la función de fortalecer los dientes dañados por caries, o que se encuentren rotos o desgastados y su principal utilidad porque permiten recuperar la masticación normal, y además mejoran mucho la estética dental.
La principal de las ventajas de las fundas dentales frente a los tratamientos basados en los implantes dentales es la conservación de la raíz natural del diente. Ello no permite por un lado un tratamiento más sencillo, menos doloroso y por otro lado menos costoso.
Como desventaja de las fundas frente a los implantes dentales únicamente podemos citar aquellas complicaciones que se puedan presentar fruto de una ejecución incorrecta del tratamiento.
DURACIÓN Y CUIDADOS DE LAS FUNDAS DENTALES
Las fundas dentales tienen una vida media de unos 15 años, teniendo en cuenta que hay casos en que no llega a los 5 años y otros en que supera incluso los 30 años. Para alargar este tiempo es importante extremar la higiene dental y pasar las revisiones periódicas oportunas que detecten irregularidades como caries y otras enfermedades dentales, así como vigilar el estado de la corona.
Las fundas no requieren de cuidados especiales de ningún tipo. Una vez se ha colocado la funda debemos tener los mismos cuidados que tendríamos con nuestros dientes naturales, es decir llevar una adecuada higiene bucodental y acudir de forma regular a nuestro dentista para las revisiones periódicas.
